La huella ambiental y la huella de carbono son dos conceptos relacionados pero distintos que se utilizan para medir el impacto ambiental de las actividades empresariales. A continuación, vamos a explicar las diferencias fundamentales entre ambas:
Huella ambiental
Mientras que la huella ambiental se refiere a un indicador de impacto ambiental amplio que abarca múltiples aspectos y que refleja las consecuencias de la actividad empresarial sobre los recursos y el medio ambiente, la huella de carbono se centra específicamente en las emisiones de gases de efecto invernadero, especialmente el dióxido de carbono (CO2).
La huella ambiental va más allá de las emisiones de gases de efecto invernadero y considera otros factores como el uso de recursos naturales, la generación de residuos, la contaminación del agua y del suelo, y la pérdida de biodiversidad. Es una métrica que proporciona una visión completa del impacto total de nuestras actividades, productos o estilos de vida en el medio ambiente.
Huella de carbono
La huella de carbono, por otro lado, mide la cantidad de CO2 liberada a la atmósfera como resultado de la actividad empresarial. Esta métrica se utiliza para evaluar el impacto en el cambio climático y se considera una parte importante de la huella ambiental general.
Hay que mencionar que la huella ambiental puede medirse utilizando diferentes indicadores y métodos, como el Análisis de Ciclo de Vida (ACV), y que incluye datos relacionados con el consumo de energía, el uso de agua, la generación de residuos y otros impactos ambientales. Por otro lado, la huella de carbono se calcula en términos de emisiones de gases de efecto invernadero expresadas en equivalentes de CO2 (CO2e). Considera tanto las emisiones directas como las indirectas asociadas con nuestras actividades.
Para finalizar, nos gustaría recordar que las empresas comprometidas con el medioambiente y que utilizan herramientas para medir su impacto ambiental contribuyen a la construcción de un futuro más sostenible.
